miércoles, 28 de diciembre de 2011

DESPEJAR EL CIELO...

Hay un momento, quizas un pequeño instante, donde el panorama real de las cosas, abre un lapsus inconsiente del pensamiento, como la vuelta de hoja a la adivinanza, a ese acertijo misterioso imposible de develar, se hace claro todo aquello pintado de gris y por un segundo encuentras el sentido a la absurda realidad de la vida.

Se quedaron atras palabras, personas, silencios, lugares, infinidad de situaciones, un millar de cielos y amaneceres, convertidos en mañanas de un ciclo agonico de rutina y eternidad. Alli atras, en el camino quedaron, marcaron un punto efimero en las huellas dejadas tras de mi, aun asi, muchos pudieron adherirse a las fibras mas sensibles de la frialdad de mi corazon.

Y no puedo detener, el reloj a las 8, xq las 10 ya serian un ocaso tardio de lo que miraste y no pudiste tener, una sonrisa desdibujada al llegar el alba, un abrazo y la calidez de un suspiro al llegar el anochecer. Lo que soy, todo aquello que desnuda la apariencia de mi rostro y una lagrima congelada por el ayer, eso es un momento, eso es eternidad, sentir que los pies despegan al cielo, atados, tan atados a ti.

Abrazo fuerte la realidad de mis silencios, mi almohada en los ensueños de la estacion mas fria de mi alma, viendo como pasa el tiempo y como el fuego centellante en el cielo dice ya, que es un ciclo el que queda detras de los recuerdos y q abre las puertas a una nueva eternidad, semejante a un anhelo arrancado de mis manos y regresado a ellas, despues de cambiar la voz de mi silencio, las marcas mas profundas de mi piel, el color de mi cabello y de tener intacto esa capacidad de sorprenderme al ver salir el sol cada mañana, con la respiracion entrecortada y una compañia adueñada de mi soledad.